lunes, 21 de junio de 2010

De Armando Molina(gungadín) y otros monstruos que en mi habitan

Que mejor cura para la distancia que acortarla

Mover los pies
dar motivos al andar
sin destino fijo.

¿Habrá que tener destino fijo
para matar la incertidumbre
de los pasos
o habrá que dar al paso
algún pretexto para moverse?

Desearía pensar que la incertidumbre
es una vieja que gusta de malgastar
tu tiempo
mientras te decides que hacer con
tu vida.


Un intento de haiku

Yace un cuerpo,
desnudo frío,
inherte, deshabitado.


Ya no adivino pasos
todos tienen destino
y por piernas segundos.

Mujer fugaz

Me gusta la mujer extraña
que desconozco en su mirada,
la observo, con un mirar
que descuida las defensas,
las carcazas del tiempo
sobre los pliegues de piel
que esconden mis huesos débiles
de tantas entregas,
hay en donde dicen que habita el alma
entre los huesos y la carne de los días
entre la sangre derramada
sobre sabanas húmedas,
ella, con su belleza que engaña
corazones dispuestos a morir
por su entrepierna, deposito de las
ansias del mundo, me ve, parte
y se va mirando sobre su hombro
cualquier atisbo de amor inútil.

Hoy

hoy se y reafirmo
que las frutas poseen olores
que aun desconozco,
que el alba rompe contra
las pupilas abiertas
como ventanas que dejan
entrar la luz al ojo,
que el sol quema
en esta época el año,
que los pajaros
hacen nidos sobre
las cornizas
a falta de arboles,
que hay mariposas
de un amarillo destellante
antes invisiblemente perceptibles
por la prisa.

Hoy se y reafirmo que el viento
posee la voz de los muertos
y que basta sentarse y dejar la prisa
para dialogar con ellos.

Hoy se quien mueve las hojas,
el alma extinta,
ese suspiro que al irse
nos deja el cuerpo vacio.

Todos huerfanos

Han de matar a un hombre
dejar a la mujer sin hijos
y a un hijo huerfano de padre,
han de matar a un hijo
y matar al anhelo de un padre
y a una madre huerfana de hijo,
han de morirse todos
y dejar hijos huerfanos de padre
padres muertos de anhelos
y huerfanas madres de hijos,
han de matar a Dios
y no existirán padres, ni madres,
ni hijos muertos de anhelo
y huerfanos de Dios.

Para mi hermano Alberto Mayorga
y su dolor que le acompaña.

En caso de accidente


Levante la tapa,
jale el seguro,
retire el cordón,
empuje el cristal,
retirelé al corazón
esa ausencia,
saquele los ojos
a esa esperanza
marchita,
y salga a observar
la tarde,
destape una cerveza
por cada amargura,
embriaguese el alma
hasta secar el vació
y pruebe otros labios
vacíos de ausencias,
y de cualquier amor de paso.


Este instinto

Tan mio, tan dulce,
tan salvaje, tan deshumano,
este callar de diálogos de carne
de la relación intrínseca
de los sexos abrazados,
del silencio de las bocas deslenguadas
y las carnes desveladas,
es la división de Dios-Hombre,
de Moral-Deseo,
la transgresión Humano-Animal,
la separación de Ser-Social,
conjunto de sensasiones satisfechas
a través de los cuerpos,
exquisito jugo del vientre amargo
de Mujer-Animal,
desmatrimoniados del papel, amantes libres,
desmontaje de la Norma-Ley Natural,
Deseo-Necesidad,
sexo, disfrute de las carnes.

Adiós

Perpetuo adiós de mujer
y caricias sin destinatario,
cartas sin membrete
y posdatas de despedida.

y todo en un abrazo al viento.

Me quedan los recuerdos

Las fotos de los viajes,
los souvenirs, las cartas
y los recuerdos de alcoba.

Los boletos del cine,
los recorridos de ida y vuelta,
porque fuimos turistas y no aventureros,
nos falto viajar más para conocernos menos.

Despedida

Sus ojos anuncian catástrofe
del momento,
sus labios son ira
que esta por estallar.

Un zarpazo, una cachetada
y un adiós que es para siempre.

¡hasta nunca!, no es hasta luego,
¡espera!, ¡no! ya he esperado demasiado.

Quien

Quien disfruta los muslos de mujer extraña,
desifra los misterios de vientres estériles,
cohabita las ausencias y los desengaños,
reacomoda las piedras del jardín de su agonía,
junta retazos de melancolía,
recuerdos marchitos del dolor pasado,
recita versos a oídos hechos
para sus propias prisas,
en sus distancias tiene hijos y muchas putas,
esposas inmaculadas en sus múltiples camas
de lujuria.

Nada ha de salir de las paredes
de su pecho donde habita
un corazón de hombre marchito,
no tendrá voz para gritar los nombres
de sus múltiples ausencias,
romperá con el silencio en llanto
en los funerales
de los parientes desconocidos,

Habrá de jugar a enamorar vírgenes
en las iglesias,
saldrá a fecundar óvulos de madres
sin hijos,
y arrancara una sonrisa
a sus propias tristezas.

Despertar

Hay una breve sonrisa al escuchar como rompe la mañana contra los cristales de mi alcoba, una luz segura de si entra hacía un rincón del cuarto iluminando en su trayecto un espacio en linea recta, que mas bien pareciera un puente por donde entran y salen los fantasmas de mi mente, un perro rompe con el silencio prolongado de la noche en sueño, espanta mi muerte en la ventana, las cobijas a esa hora pesan como cuerpos apilados de cansancio. Es hora de empezar rutina.

Soy de esos poetas

Soy de esos poetas parásitos de la luna
que en constante pecado de gula
ha dejado huellas sobre la superficie,
cráteres de dolor y angustia,
cráteres de amor y deseo,
cráteres llenos de llanto congelado,
cráteres de lujuria contenida
entre los muslos y la carne.

Soy de esos poetas que habitan
como gusano en la manzana, dentro,
comiendo de los vientres lunares
que tantos poetas han dado a luz.

Poeta alacrán, alacrán poeta
alimentado del vientre de su propia madre.

Soy de esos poetas parásitos de la luna
que un buen día acabará´por extinguirla,
¡lo bueno es que los poetas también son mortales!

Sin titulo

Hay dias que se piensa
demasiado en la muerte,
cuando soledades se encuentran
no se piensa en ella,
se hace a un lado
como aquella novia eterna
que siempre vuelve al pensamiento
cuando uno esta solo
ahogadode palabras muertas,
o cuando en esa impenetrable ausencia
de si mismo se preguntacualquier cosa
y se responde; muerte.

Hay días en definitiva,
que no se piensa más en al muerte,
cuando es que se ha enamorado de ella
o imprescindiblemente cierra
las puertas del cuerpo por donde
nos roba el alma.



De reproches diestros
capaces de romper
con la tranquilidad de un alma.


itinerario de un día soleado.

desayuno, pensando en ti,
almuerzo, pensando en ti,
comida, pensando en ti,
cena, pensando en ti,
si me pagaran un salario justo
por pensarte dejaría el trabajo
para dedicarme a pensar en ti
como eso no pasará mejor
me dedico a olvidarte.

Sin titulo

hoy
no guardo
soledades en un bolosillo,
no enveneno el alma
con besos desterrados,
hoy no me voy con ustedes,
me quedo aquí
donde solo existe el rumor
de una voz desahogada,
donde un murmullo
de viento y flores
me hará sonreir una tarde,
aqui me quedo
bajo cielos incendiados,
mar de cielo
y dialogo de cama, de acera.

Triste Señora

Porqué está triste
de sus ojos se le cae el corazón
a pedazos,
su boca pide clemencia
de un crucificado.

¿que contiene su rezo
que se le escapa del pecho el dolor
y las mil angustias de sus hijos distantes?
¿hacía donde se encuentra Dios
para dirigir la mirada?
solo para ver si sus ojos la miran.

¡Decidme hacia donde van sus rezos,
en que parte del cielo se encuentran
sus plegarias!
solo para saber que este ejercicio
de hablar con Dios no es una perdida
de tiempo.


No me extrañen


No me extrañen
a veces tambien grito
mi nombre para ver
si me lo devuelve
viento.

Solo regresa un aire
encarnado de mil angustias,
un viento frio de polo norte
una caricia añeja y desgarrada
del recuerdo de mi infancia,
oh! infancia alegre.

Regresa el otoño en mi ventana
aunque este cuarto no las tenga,
es el viento del invierno
el que toca a la puerta para que yo salga,
es mi soledad la que abre y lo despide
para que no salga a jugar,
vuelve la cerradura al cerrojo
para que no escape,
lo que mi soledad no sabe
es que tengo puertas y ventanas
que en este cuarto no existen
y se abren al cerrar los ojos
y la dejo sola con la masa
que yace inherte en su cama
de mil tristezas y alegrias.



LOS DOMINGOS NO SE MUERE

Los domingos no se muere
Se descansa, se toma aliento,
Se prepara el cuerpo
Para morir el resto de la semana
Entre monotonías de oficina
Y horarios que comienzan
Sin sol y terminan con luna,
Se muere entre el trafico
Y su sinfonía de claxon,
Entre el sonido de fábrica
Y máquina de coser,
Se muere en el fregadero entre la lavadora
Y la telenovela de las tres,
En el asiento del taxi y la micro,
Entre el crucero y los parabrisas
Entre malabares y bocanadas de fuego
Se muere a diario.

Los domingos
Los parques se llenan de vida,
Se reza a los santos, se alaba a Dios
La mesa se sirve para siete y no para dos.

La tía viene a comer con su don Pedro,
Paco siempre viste de fútbol,
Mama preparo enchiladas con agua de horchata.

Los domingos la muerte descansa
Se da el día libre, descansa en las mesas
Entre el día de campo en Chapultepec,
El partido de los pumas y la reta de fútbol,
Espera a que llegue el lunes y llega en forma
De jornada sin fin y salarios deprimentes.

Pero lo que se sabe y es cierto
Es que el domingo no se muere
Bajo ninguna circunstancia ni de broma,
Los domingos se piensa en morir
Así lo dice Luis, lo dijo Gaby y lo grito Víctor,
El domingo en la mesa entre el cigarro
Que se extingue entre la plática de la tía
Y el discurso de Lalo
Que salió el lunes
Para morir en la oficina.


SON JAROCHO

Son de mi tierra,
Jarana, jarocho,
Copla del alma
Honda rima
Del corazón alegre.

Sombrero, guayabera
Y botín
Versando vidas
Andando veredas.

Juglar de pueblo,
De plaza, de parque,
Voz de un silencio crudo,
Cantar de vida,
Rocío de senda,
De montes, de selva.

Voz de voz
De la voz de aquel,
De este, del otro,
Del nosotros, de ustedes.
Canto del ser
Letra improvisada.


MUERTE COTIDIANA

Muerte cotidiana
De ojos sin brillo
Y miradas ancladas en el vacío,
De rostros secos,
Sin sonrisa,
De monotonía sin fin
Con dieciséis horas diarias
Y trafico de ciudad,
Entre estrés y muchedumbre,
Muerte lenta, fin dilatado.

Al final el rincón
Que reserva al olvido
Donde los pensamientos paran
Y el movimiento cesa,
Donde la vida enamorada
Ha partido del brazo de mi amada muerte,
Donde el cuerpo se pudre
En su morada de cedro y oropel,
Donde la monotonía tiene fin.

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